domingo, 28 de febrero de 2010

Historia de Vietnam

Desde el siglo I al siglo VI, el sur del Vietnam actual formaba parte del imperio hindú Funán. El imperio Shampa apareció aproximadamente en la actual Da Nang, a finales del siglo II, y se extendió hacia el Sur en la actual Nha Trang, en los alrededores del siglo VIII. Los chinos conquistaron el delta del río Rojo en el siglo II, y mantuvieron su dominio durante mil años, período marcado por una resistencia vietnamita tenaz y por rebeliones constantes. El control chino finalizó en el año 938, cuando Ngo Quyen derrotó a las tropas chinas en el río Bach Dang.


Durante los siglos que siguieron, Vietnam repelió repetidas invasiones chinas y extendió sus fronteras hacia el sur del delta del río Rojo y repobló gran parte del delta del Mekong. En 1858, fuerzas militares dirigidas por franceses y españoles atacaron Da Nang como reacción al asesinato de diversos misioneros.

Francia había apoyado las pretensiones al trono de uno de los contendientes contra el resto con la intención de obtener, posteriormente, importantes privilegios mercantiles. En lugar de los ansiados beneficios, se desató una persecución contra los misioneros franceses, durante la cual algunos de ellos fueron ejecutados, lo que motivó que el emperador Napoleón III ordenase una expedición naval para castigar a los vietnamitas y establecer un protectorado francés.

En 1862, derrotada, la corte de Huê cedió a los franceses las provincias del delta del Mekong, después llamadas Cochinchina, y tras una nueva ofensiva lanzada en 1880, se estableció el definitivo protectorado francés sobre todo el territorio de Vietnam.

En 1867, Francia ya había conquistado el sur de Vietnam, convirtiendo este territorio en la colonia francesa de Cochinchina.

A pesar de sus esfuerzos, el gobierno francés no sólo no consiguió anular la conciencia de identidad nacional en el país, sino que, intentando fomentar el desarrollo industrial, hizo que en las zonas rurales los campesinos se viesen asfixiados entre los impuestos y los terratenientes colaboracionistas. Entre los trabajadores de minas e industrias el descontento fue cada vez mayor por los bajos salarios y las pésimas condiciones de trabajo.

En consecuencia, a principios del siglo XX, comenzaron a surgir partidos nacionalistas que exigían la independencia de Vietnam y, ya en 1930, bajo la dirección de Ho Chi Minh, se fundó el Partido Comunista Indochino.

La guerrilla comunista indochina, liderada por Ho Chi Minh, resistió al dominio francés. La declaración de independencia que proclamó el político vietnamita, tras la II Guerra Mundial, incitó confrontaciones violentas contra los franceses, que culminaron con la derrota militar francesa en Dien Bien Phu, en 1954.

Los acuerdos de Ginebra de ese mismo año dividieron temporalmente Vietnam en dos zonas: el comunista Vietnam del Norte y el anticomunista apoyado por Estados Unidos, Vietnam del Sur. A la altura del paralelo 17, se dividía el norte al vietminh y el sur a los franceses y los vietnamitas que les apoyaron durante la guerra. Si bien, para evitar la definitiva partición del país, se acordó la convocatoria, en el plazo de dos años, de unas elecciones nacionales que reunificasen el territorio.

Tras el acuerdo de Ginebra, los vietminh de Hanoi abandonaron las armas y se aprestaron a crear un régimen comunista que encontró su contestación en Saigón con la formación de un gobierno por parte de Ngô Dinh Diêm reconocido anticomunista que, con el apoyo de Estados Unidos, se negó a celebrar elecciones.

En 1965, el presidente de los Estados Unidos, Lyndon Baines Johnson, aprobó el bombardeo sistemático de Vietnam del Norte y el envío de tropas de combate al Sur, iniciando con ello la implicación directa de su país en la guerra.

En 1968, tras la sangrienta ofensiva del Tek, que hizo tambalearse al gobierno de Vietnam del Sur, el entonces presidente norteamericano, Richard Nixon, inició una política de retirada gradual de tropas ante la oposición a la guerra dentro de su propio país y el avance cada vez mayor del ejército norvietnamita, que culminó el 30 de abril de 1975 con la ocupación de Saigón por las fuerzas del ejército comunista.

Por fin, en 1976, la reunificación era un hecho bajo la bandera de la República Socialista de Vietnam, y la ciudad de Saigón cambió de nombre para pasar a llamarse Ho Chi Minh. Pero la calma no había llegado aún al país, porque fue entonces cuando, huyendo de las políticas socializadoras del nuevo gobierno, comenzó el éxodo de refugiados, los «boat people», que sólo durante el año 1979 alcanzaron el número de 200.000.

Sin haberse recuperado de la reciente lucha armada contra Estados Unidos, se desarrolló un conflicto diplomático entre Hanoi y Camboya, país gobernado por los khmer rojos desde 1975. Una serie de enfrentamientos finalizó con la intervención y el apoyo de China a Camboya; persistieron las matanzas hasta el acuerdo establecido por Naciones Unidas mediante el cual las fuerzas vietnamitas abandonaban Camboya en 1989.

Finalmente, el final de la guerra fría y la disolución de la Unión Soviética en 1991 provocó un acercamiento entre Vietnam y las naciones occidentales.

Los cambios provocaron una nueva Constitución firmada en 1992, en la que, si bien se reforzó la posición del partido, también se dieron garantías para el establecimiento de capitales extranjeros en el país, lo que produjo el levantamiento del bloqueo económico al que Vietnam se había visto condenado tras la guerra y la recuperación de relaciones diplomáticas con los países occidentales que, en el caso de Estados Unidos, se reanudaron en julio de 1995.

Vietnam experimentó una explosión económica propia de la posguerra. Pero en la actualidad, la economía ha decrecido y el país se encuentra en una encrucijada, si bien algunos comentaristas predicen que este país será el próximo tigre asiático.